ElDemocrata

España en español es para cualquier persona que viva en España, visite España o cualquier persona interesada en las últimas noticias, eventos y deportes en España. Descubra más ahora.

Asociaciones estratégicas de la UE para proporcionar un suministro flexible y sostenible de materias primas

Asociaciones estratégicas de la UE para proporcionar un suministro flexible y sostenible de materias primas

Cuando se trata de minerales vitales, Europa enfrenta el triple desafío de trasladar los suministros hacia el interior, asegurar mercados globales diversos y hacer todo esto de manera sostenible. Dado que se espera que la demanda de minerales como el cobre y el litio utilizados en tecnologías verdes se cuadruplique de aquí a 2040, la UE seguirá dependiendo de la importación de materias primas de terceros países durante mucho tiempo. Las investigaciones muestran que incluso si Europa logra maximizar sus capacidades de extracción, refinación y reciclaje de metales para 2030,Más de la mitad de los minerales importantes todavía tienen que venir del extranjero. Así que el desafío es obtener estos minerales de una manera que sea flexible –es decir, de diversos mercados– y responsable, es decir, con estándares sociales y ambientales fundamentalmente altos. Aquí es donde entra en juego el nuevo marco europeo para las “asociaciones estratégicas”. En este documento, T&E analiza el progreso hasta el momento y analiza lo que Europa necesita hacer para tener éxito.

El principal desafío hoy en día es que el suministro de materias primas críticas (CRM) de terceros países está sorprendentemente concentrado. Por ejemplo, China sigue siendo el único proveedor de tierras raras procesadas a la UE y representará entre el 85% y el 100% en 2023. Chile es responsable del 79% del suministro de litio de Europa, mientras que la República Democrática del Congo suministra el 63% del cobalto. A nivel mundial. Fundamentalmente, la gran mayoría de todos estos metales se procesan en China, que tiene casi un monopolio en el medio de la cadena de suministro. El surgimiento del nacionalismo de los recursos y de las restricciones a las exportaciones en países como Indonesia, China, Chile, Namibia y Zimbabwe plantea otro desafío importante, a medida que los países ricos en recursos buscan construir su propio procesamiento de minerales y fabricación de tecnologías limpias, al tiempo que interactúan con socios externos como el Unión Europea.

Para diversificar el suministro de materias primas vitales de la UE, la UE ha comenzado a utilizar la herramienta de asociaciones estratégicas para mejorar la cooperación con terceros países. En 2021, la Unión Europea firmó memorandos de entendimiento para la asociación estratégica con Canadá y Ucrania. En 2022 se firmaron acuerdos similares con Namibia y Kazajstán, seguidos de asociaciones adicionales en 2023 con Argentina, Chile, Zambia y la República Democrática del Congo. Estos MOU están diseñados para integrar cadenas de valor de materias primas, identificar proyectos colaborativos y mejorar la investigación y el desarrollo manteniendo al mismo tiempo estrictos estándares ambientales, sociales y de gobernanza. Este enfoque ayuda a la UE a asegurar su cadena de suministro al mismo tiempo que aborda sus necesidades e intereses internos y promueve el desarrollo económico en los países ricos en recursos.

Pero el desafío que enfrenta Europa para ponerse al día es enorme. China ha invertido 15 mil millones de euros en proyectos minerales globales sólo en los últimos años. Por lo tanto, a medida que la UE amplía sus asociaciones estratégicas, debe actuar rápidamente y adaptar su enfoque a los países ricos en recursos para construir un punto de venta único. Para asegurar el suministro vital de minerales de Europa, la UE debe apoyar los planes de industria verde en los países ricos en recursos, centrándose en la transferencia de tecnología, habilidades y prácticas responsables de minería y procesamiento. . El enfoque a través de asociaciones estratégicas puede ser un camino prometedor a seguir si va acompañado de proyectos e inversiones concretos. En este sentido, lo que nos falta es un compromiso comercial rápido y de largo plazo por parte de los fabricantes occidentales de automóviles y baterías, así como de la industria metalúrgica.

Para que estas asociaciones tengan éxito, la Unión Europea debería:

  1. Establecer asociaciones más estratégicas con una variedad de países socios y establecer prioridades claras para los minerales críticos necesarios: Además de altos estándares sociales y medioambientales, se necesita un enfoque preciso. Por ejemplo, Europa necesitará muchos más metales para baterías que hidrógeno verde en la próxima década.
  2. Promoción de cadenas de valor industriales verdes locales y prácticas de abastecimiento responsable en países ricos en recursos: Esto incluye el desarrollo de actividades de procesamiento y fabricación, la transferencia de tecnología real, la mejora de las habilidades de la fuerza laboral local, así como actividades de desarrollo de capacidades.
  3. Establecer un marco de financiación sólido, incluidos nuevos fondos a través de la Iniciativa Global Gateway y un fondo CRM dedicado.La UE debería apoyar financieramente estas iniciativas a través de garantías, subvenciones y préstamos, haciendo que los proyectos en el extranjero no sólo sean atractivos, sino también económicamente viables y escalables. Se necesita un fondo específico para eliminar riesgos de los proyectos y desarrollar capacidades técnicas y regulatorias en los países de la asociación estratégica.
  4. Participación de empresas de la UE: Contar con empresas de tecnología limpia en Europa con acuerdos de compra a largo plazo, así como apoyo con experiencia y habilidades tecnológicas, es fundamental para el éxito de las asociaciones estratégicas.

En general, abordar la brecha Norte-Sur y asegurar cadenas de suministro de minerales sostenibles requiere una perspectiva global, con la participación de muchos socios con ideas afines. Esto implica armonizar las normas, garantizar su aplicabilidad y trabajar conjuntamente para evitar la fragmentación de iniciativas.